Roses es una localidad mediterránea, turística y marinera ubicada en el norte de la Costa Brava, entre el parque natural de Aiguamolls de l'Empordá y el parque natural de Cap de Creus. Los encantos de esta región son infinitos, la igual que las posibilidades que ofrece. Podemos descubrir su interesante legado histórico, admirar unas fantásticas puestas de sol, disfrutar de un montón de deportes de aventura, vivir la cultura y la tradición local o degustar una gastronomía con excelentes productos locales.
Así pues, si estás pensando en comprar una casa o un apartamento con terraza, considera poner en Roses tu foco de atención, por los motivos mencionados y por los inmejorables beneficios de vivir junto al mar.
Vivir cerca del mar: una fuente de salud
Vivir cerca del mar tiene muchísimos beneficios a nivel físico y mental. Esto es algo que han confirmado varios estudios. Uno de ellos se realizó en Nueva Zelanda y concluyó que la cercanía al mar está relacionada directamente con una notable disminución del estrés psicológico.
También se han hecho investigaciones en la Universidad de Michigan con un resultado similar, añadiendo que uno de los motivos que favorecen este fenómeno tan positivo, es que es un ambiente que estimula la práctica de actividades físicas al aire libre, algo fundamental para la salud general, del cuerpo y de la mente. También se ha señalado que el aire salado que esparce las olas en los entornos marítimos, resulta muy beneficioso para aliviar problemas del sistema respiratorio. Según distintas investigaciones, los pacientes que padecen determinadas dolencias que provocan bronquitis, asma o algunos tipos de alergias, experimentan una reducción de los síntomas cuando pasan un tiempo junto al mar.
Generalmente cuando se vive, o se pasan largas temporadas cerca del mar, aumenta la frecuencia a la exposición solar lo cual estimula la síntesis de vitamina D, fundamental para reforzar nuestro sistema inmunológico. Esto mejora la salud ósea, disminuye el riesgo de cáncer y aumenta la producción de endorfinas. Si además, nos adentramos con frecuencia en el mar, nos beneficiaremos de las propiedades del agua salada sobre la piel y estaremos contribuyendo a mejorar la circulación.
Otro estudio realizado en la Universidad de Exeter, en Inglaterra, confirmaba que el sonido de las olas del mar hacen que nuestro córtex prefrontal se active. Este área del cerebro está vinculada con la emociones y la capacidad de autorreflexión, por lo que favorece el autoconocimiento y el bienestar mental. Las olas también producen iones negativos que, al ser absorbido, provocan determinadas alteraciones moleculares en el organismo, proporcionando sensaciones de equilibrio y paz.
Un apartamento con vistas al mar y terraza en Roses
No puede haber mejores motivos para adquirir un apartamento cerca del mar en Roses. Ya sea para vivir durante todo el año, o como segunda vivienda, para vacacionar y hacer pequeñas escapadas en los días libres. Roses y toda la región del Alto Ampurdán es una zona ideal para establecerse, donde, además de una costa maravillosa, existen muchos otros atractivos naturales. Tener un apartamento con terraza y vistas al mar, es sinónimo de calidad de vida, especialmente si hablamos de la Costa Brava.
Disponer de una terraza en una vivienda en una zona como Roses, donde el buen tiempo es la tónica general, es una garantía de bienestar, ya que permite disfrutar mucho más de la vida exterior, del sol y del aire libre. Ofrece un montón de posibilidades ya que se puede comer, cenar, relajarse o hacer reuniones de amigos en una zona exterior totalmente privada. Cenar en una terraza propia durante las noches de primavera y de verano es un verdadero lujo a nuestro alcance en Roses. Incluso, se puede instalar una pequeña estufa de calor para aprovechar también ese espacio en invierno. La posibilidad de contemplar el paisaje de la región con el mar Mediterráneo de fondo, es un verdadero placer para los sentidos y para el espíritu. Vivir en una zona rodeada de belleza natural y tranquilidad, con múltiples playas cercanas donde realizar actividades deportivas o, simplemente pasear, es apostar por la salud, el bienestar y aún más: por una vida más feliz.
En Procasa tenemos un amplio catálogo de apartamentos con terraza y vistas al mar con diferentes características. Áticos luminosos con una o dos terrazas y fantásticas vistas a la bahía de Roses o duplex con garaje privado disponible. Contamos con viviendas situadas en zonas residenciales, muy tranquilas, perfectas para familias y personas que valoran la paz y el silencio en su día a día. Pero también tenemos viviendas más cercanas al núcleo urbano y el puerto marítimo, para aquellos que prefieren estar cerca de todos los servicios y la vida alegre de esta localidad marinera.
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